En la sierra de la Capelada, cerca del bonito pueblo coruñés de Cedeira,famoso por su exquisitos percebes, nos encontramos tras ir dejando atrás los enigmáticos milladoiros (túmulos de piedras que los peregrinos amontonaron durante siglos en determinados sitios del camino ) con la pequeña Aldea y Santuario de San Adrés de Texido.
Este misterioso y sobrecogedor lugar, está poblado de Leyendas relacionadas con la cultura celta. Otra de ellas señala que uno de los 12 apóstoles naufragó, encallando en losimponentes acantilados de lugar, quedando convertida su barca ,en un peñasco conocido como la Barca de San Andrés. Para aliviar sus penas el Señor le prometió que se erigiría un Santuario donde todos los años se celebraría una Gran fiesta o Romeria a la que acudirían vivos y muertos ,de ahí el dicho popular vai de morto quen non foi de vivo (va de muerto quien no fue de vivo)
Parece ser que la peregrinación comenzó algunos pocos siglos después, pero la promesa de erigir el santuario, se cumplió cuando en el siglo XII se levantó el monasterio entregándoselo a la Orden de San Juan de Jerusalen, si bien lo que hoy vemos, fue reformado durante los siglos XVI al XVIII, entremezclándose el estilo gótico del arco apuntado de la entrada con el barroco predominante del Retablo Mayor y relicario con algún huesos del apostol.
Desde este lugar de culto y recogimiento, tan sólo estropeado por los modernos molinos de viento que pueblan nuestra geografía, uno puede contemplar la majestuosidad del mar bravío y escuchar el rugir del vientocontemplando una imponente y sobrecogedora vista desde el Mirador de Vixía de Herbeira, asomándonos al atlántico desde una de las más altasdespeñaduras de toda Europa con 620 metros de desnivel sobre el mar.
Año tras año acuden miles de romeros para cumplir con las tradiciones del lugar, dejando su piedra en algunos de lo milladorios, pidiendo un deseo a San Andres tras beber en la fuente de los Caños y arrojando al agua un trozo de pan, que sino se hunde será señal de buena fortuna. Tras disfrutar de la Fiesta es costumbre que los romeros regresen a su casas, tras comprar la famosasfiguritas de pan de San Andrés, portando un ramo formado con una vara de avellano y ramitas de tejos y de hierba de enamorar (Armenia pubigera) tan abundante en toda la sierra .
No hay comentarios:
Publicar un comentario